Está en vos presenta, una colección digna de admirar...
ARGENTINA, TIERRA DE PARADOJAS.
Hoy, en nuestro volúmen uno, una paradoja en la que quizás pocos han reparado: el grado de humanismo de nuestros próceres en nuestra moneda patria, según sube su valor.
Conforme aumenta el valor del billete, en nuestro país aumenta, a su vez, el grado de xenofobia y racismo indiscriminado, y disminuye de manera considerable la tolerancia, el humanismo y el patriotismo.
Ejemplo demostrativo N°1: Ponga a prueba sus conocimientos y valores más básicos:
Hubo una vez un presidente que, en nombre del progreso y al hacerse imperceptible la ocupación del espacio patagónico, llevó a cabo una campaña. Esta operación, mal llamada "campaña del desierto", terminó con la matanza indiscriminada de gran parte de la población indigena de nuestro país y la reducción a la servidumbre de más de 14 mil de ellos que fueron entregados a las familias adineradas de Buenos Aires. Además de esto, que está claro que no es poco, se regalaron (porque otro calificativo no cabe) enormes extensiones de tierra patagónica para el beneficio de unos pocos, como los Martínez de Oz, los Pereira Iraola, los Luro, los Anchorena, los Alzaga Unzué y la lista se podria completar con los Benetton en la actualidad.
Este hombre, en un país sensato, no tendria cabida en ningún billete, ni aunque fuese de un centavo. Pero claro, aquí, su cara se encuentra en el papel moneda de más alto valor. Fijate con que tierna cara de genocida xenófobo salió el Presidente Roca en el billete de 100 pesos...
Ejemplo demostrativo N°2: El segundo en valor, uno de los primeros en odio y discriminación.
Escuchá estas célebres palabras:
"Una Constitución pública no es una regla de conducta para todos los hombres. La Constitución de las masas populares son las leyes ordinarias, los jueces que las aplican y la policía de seguridad. No queremos exigir a la democracia más igualdad que la que consienten la diferencia de raza y posiciones sociales. Nuestra simpatía para la raza de ojos azules"
O nutrí tu cabeza con estas otras: “por los salvajes de América siento una invencible repugnancia sin poderlo remediar. Esa calaña no son más que unos indios asquerosos a quienes mandaría colgar ahora si reapareciesen”.
Ahora, abrí tu billetera y, si sos de los afortunados que conserva un billete de 50 pesos, conocé al autor de estas edificantes palabras. Domingo Faustino Sarmiento, un grande.
Ejemplo demostrativo N°3: Manuel Belgrano y José de San Martín ocupan 2 de los 3 escalafones más bajos en cuánto a valor de billetes se refiere.
Belgrano sin dudas se lo merece, fue una pésima persona que, además de ser de las más comprometidas en busca de nuestra definitiva independencia, prefirió morir en la pobreza al no aceptar como propio un tributo otorgado por el gobierno. Preferia ser hijo de la patria, antes de que lo llamasen padre de la misma. Claro, cómo puede ser que un prócer nuestro sea tan humilde, así no va la cosa...
Y qué decir de José de San Martín. Una persona considerada libertadora de no uno ni dos, sino tres países latinoamericanos y que consideraba a los indios personas e iguales. San Martín se refería como a "nuestros paisanos, los indios", a lo que varios personajes (premiados con suntuosas estatuas y calles coquetas en la actualidad) llamaban "salvajes".
Argentina, tierra de paradojas... Conozca nuestra historia y maravillese al entender que la Argentina siempre de dedicó a patear con los de afuera, para así poder patear a los de adentro.
ESTA ES OTRA CAMPAÑA DE ESTÁ EN VOS, EN BUSCA DE UNA CONCIENCIA Y UNA COHERENCIA QUE SEGÚN PARECE, NUNCA TUVIMOS.
Posteo de Santi grandi & Lucas García.
